sábado, 22 de mayo de 2010

Apreciado Alberto:

---Sólo te pido que si te sobra un poco de tiempo, si no te cansas con esta perorata, llegues hasta el final.


Debo decirte que me pusiste en la picota, me juzgaste, me condenaste y luego elegantemente me diste un medio indulto.


¿Querés saber algo? No esperaba tu contestación. Me llamó la atención. No te conozco, es cierto, pero no conocí a grandes y a pequeñas personas, más que por sus obras y dichos así pude libremente pensar de ellos y ni siquiera me asiste en la mayoría de las veces ese derecho. No soy juez. No voy a pedirte perdón, sí comprensión, si está en tu ánimo. No te quise importunar.

Nada de lo que me decís me puede alterar, a esta altura de mi vida, con más derrotas que aciertos.
Poco espero, ni siquiera de Dios o como se le quiera llamar. Cuando era chica, hace tiempo y a lo lejos, me aterrorizaban con promesas de castigos divinos. ¡Qué estupidez! La mayoría de las veces, algunos, nos castigamos a nosotros mismos. ¡Vaya uno a saber por qué! (No me refiero a vos es u7na disquisición mía)

Nadie me molesta (Mejor dicho sí me fastidian algunos políticos endiosados). El camino hacia mi luz (si la hay), está sembrado de escollos, piedras en las que muchas a veces tropiezo, cosa que suelen ocurrirnos a los humanos.

No soy una intectualoide ¡Dios me libre! Soy sólo una simple pensadora que no se las cree, muy por el contrario; ni siquiera creo tener una pequeña y miserable inteligencia. (Perdónalo a Julio, él a veces es demasiado entusiasta). Claro, que por otra parte, tampoco soy idiota.

No pretendí ¡jamás! Insultar a tu inteligencia ¡No hubiera podido! ¿Con qué elementos? Ni quise sicoanalizarte baratamente. ¿Qué sé yo de eso? Alguna vez, en mi vida pude haber sido obtusa, me creí astuta y marisabidilla pero eso se cura con los años.

Lejos de mí el querer invadirte o agredirte. No fue algo pensado. Yo soy así nomás, pero sin malicia.

En ningún momento te dije que eras ateo, aunque… al final de cuentas qué importancia tenía (Para vos quizás). No necesitas usar un megáfono reiterativo para gritar tu agnosticismo, soy hipoacusica más aún puedo leer y no soy tan dura de entendederas.

Trabajase para tener tu vida profesional, doméstica y social, no por que seas agnóstico. No te indignés conmigo que soy tu contrapartida.

Ese escalón que la humanidad alcanzó, costó miles de millones de años terrestres. Una nada en los tiempos del Universo. Pude ser que haya agujeros negros, que existió el big bang (o algo así), pero ¿Quién lo dice? Científicos humanos… ¿Será) Hoy… Puede…
La inteligencia humana existe… Vos lo sabés y obrás en consecuencia. (No te estoy analizando. no te equivoques)

No es mi in tención ni mi atrevimiento llega a tanto para querer hacerte cambiar, que pienses diferente. Sería un absurdo. Sos dueño de escribir lo que se te cante (No te estoy dando permiso) sin que por ello alguien venga con ánimo reformador. ¡Nunca seré yo esa! No está ni estuvo en mí hacerlo.

Cuando hablé de madurez, quise generalizar. Hay madureces íntimas…emocionales, que no están a la vista, pero, ¿cómo saberlo en vos si no te conozco? Con qué derecho lo diría. Aunque… quizás lo hice, no me acuerdo. No lo tomes en cuenta.
Lo que sí dudo es que humorísticamente hayas escrito esa carta a Dios, sólo por estar… aburrido. Eso es lo que raciocina mi pequeña mente y, tal vez no tenga nada que ver con tu intención, tampoco creo que vos escribas gansadas, ¿ironizaste… acaso? Me quedo equivocar…

No creo que seas leve… lene mentalmente. ¡Absolutamente dirá eso de vos! Vos sabes lo que sabes y yo lo que creo saber.
Te pido que no te cabrees conmigo o mis pensamientos, no vale la pena. Ni siquiera casi existo. Soy prácticamente nada pero a mí eso no me desvela
Cuando te escribí iba a poner que el agnóstico estaba entre del dogmatismo religioso y el ateísmo pero se me fue la idea y vos me ganaste de mano ¿Es más o menos esa tu idea?
Hace mucho que no me creo demasiado pura o blanca en fe, Soy crítica de la misma pero estoy segura que eso es provechoso. Muchas personas murieron por su fe, especialmente en el amanecer del cristianismo. Lo que pasó con los siglos, pensando en la Edad Media especialmente fue, con excepciones, una caricatura de religión. No lograron destruirla del todo.

También estoy llena de “porqués” de posibilidades o no, a favor y en contra. ¿Estaré siendo demasiado tibia?

Hace mucho que pienso que no hay perfección humana, aunque dicen que somos imagen y semejanza pero, no iguales. Hay quienes caminan hacia la perfección.

No tengo ánimo inquisidor me has mal interpretado. No soy precisamente admiradora de Torquemada y sus seguidores, Ya te dije que no hay rayos ni láseres que nos vayan a castigar por lo que pensamos. Dijo Voltaire “Las ideas no se matan” Luego lo tomó para sí Sarmiento agregándole, quizás, al principio, la palabra: Bárbaros.

Me gusta sí cierta forma de ecumenismo, pero creo que falta aún.

Nunca te quise denostar…Tal vez hace muchos años alguna vez fui así, pasaron muchas aguas bajo los puentes, hoy no podría. No tengo casi prejuicios ni siquiera religiosos. No defiendo causa algún a cada quien lo suyo.

A veces necesitamos curarnos y posiblemente sanarnos un poco. Está dentro de nosotros esa cura síquica. Física o espiritual. El cuerpo, a veces protesta. Hay algo que se llama: “Poder curativo natural” La naturaleza o quién sabe quién la puso allí desde que éramos cigoto. Hay veces que actúa solo y otras en que debemos trabajar en él.

¿Qué es cuestión de fe? Sí lo es ¡En nosotros mismos! En nuestra parte “santa”.
También necesitamos un A.M.P. o sea una Actitud Mental Positiva, sobre nuestra vida o sobre las cosas. Aunque soy escéptica la uso en mí y veces me da resultado.

¿De qué va esto? De nada. De vez en cuando me voy por las ramas.

No vivo en el mundo de la fantasía sino en uno muy real, demasiado real te diría. Los que nos creemos poetas, quizás no muy buenos, creemos que vemos un poco más allá ¡Que soberbia) En boca de Hamlet, Shakespeare dice. –“Hay algo más en el Cielo y en la Tierra, Horacio, de lo que ha soñado tu filosofía”— (Acto 1 escena 5) (Alguna traducción dice entre el cielo y la tierra, pero no es seguro).

Por otra parte, no olvides, que el único que sabe de vos… sos vos mismo. Mostrás lo que querés o lo que podes. Fuimos a través de los años poniéndonos máscaras aún ante los seres amados. De nosotros depende despreciar algunas, pero, no hasta tal punto de quitarnos la última, quedaríamos descarnados y eso tampoco vale la pena. Posiblemente vos no las utilizaste, no te hicieron falta.
En el mundo real existe un mouse con una flechita, y podes con dos toques borrar o desaparecer como con un láser esta carta y olvidar (ya lo estás haciendo) que existo. ¡Aunque quién sabe si alguna vez existí!...
P/D: Te mando una flor mental… una violeta en son de paz.
Un abrazo.
Dora del Valle D.

No hay comentarios:

Publicar un comentario